jueves, 12 de junio de 2014

Puede ser

Esta mañana de camino al trabajo, ha sonado, en un cd viejo medio olvidado, una canción que no recordaba. He tenido que controlarme para no llegar hecha un mar de lágrimas. Y es que estoy de lo más reglosa e hipersensible. Pero no eran lágrimas de tristeza sino de fuerza...


Porque siento que todo va a ir bien, que se nos ha cerrado esta puerta pero se abrirá otra, o un gran ventanal con vistas al mar. Y sí, más fácil, porque cada vez es más fácil, vas cogiendo práctica a la fuerza. 

"Y puede ser que vuelva a perder, pero la vida me dice que me toca a mi eso de sentirme bien"

En Enero, tras el negativo, hablamos de la adopción, estábamos dispuestos a empezar los trámites, pero dos días después llegó el sobre de La Fe y lo dejamos aparcado por el momento. Nos quedan dos oportunidades en la Seguridad Social, pero como la adopción es un proceso muy largo, sin prisa pero sin pausa, iremos haciendo camino. Yo era de las de "solo dos niños/as", pero hoy en día pienso que mejor 1, 2, 3 o 4 que ninguno, así que al final seremos los que tengamos que ser, vengan los que vengan y vengan de donde vengan. Quizás sea ese mi destino, quién soy yo para desafiarlo?


Aprovecho también esta entrada para dar las gracias a la gente que me da su apoyo, a los que me leéis y a los que me dejáis comentarios tan llenos de cariño. Este blog no es nada sin vosotros. Gracias.

Y hoy estoy generosa, así que voy a darle las gracias a mi marido también, que hace mucho que no le dedico unas palabras por aquí y sé que está deseándolo. Marido mío, tú ya sabes que yo sin tí no podría levantarme, que eres mi pilar y que admiro toda esa fuerza que sacas de no sé donde, con un marido así tienen que venir más superpeques, no puede ser de otra manera!

domingo, 8 de junio de 2014

sábado, 7 de junio de 2014

Mañana es el día

Llevo casi dos semanas esperando al día de mañana y, sin embargo, hoy me gustaría parar el tiempo.

Creo que lo he llevado bastante bien esta vez, aunque mi marido no opina lo mismo (básicamente porque venía muy cansada de trabajar, y mi yo cansada es insoportable). He procurado mantenerme entretenida, ocupar mis pensamientos en la lectura o en pelis y series, y la verdad es que ayuda mucho. Se me ha pasado rápido, entre otras cosas porque también tengo mis proyectos en marcha, y eso me mantiene el ánimo arriba.

Y ahora tengo miedo. Me digo que cualquier síntoma de regla o de embarazo puede ser causado por las hormonas que llevo metidas en el cuerpo, y creo firmemente en ello, pero hoy no soy capaz de engañarme. He empezado a marcar, y no deseo otra cosa que sea por implantación, y ahora mismo tengo las molestias típicas de la señora de rojo, y me recuerdo que conozco a muchas mujeres que también las sintieron antes de su positivo e incluso durante el embarazo. Y la llama de la esperanza aun no se ha apagado, por eso tengo miedo. 

Quisiera seguir pensando que nuestro super embrión es un campeón, que sigue creciendo, que se convertirá en lo que más deseamos. Que en Febrero seré la mujer más feliz del mundo, y que todo lo que hemos hecho y pasado no ha sido en vano. En el cambio que nos urge en nuestra vida, en productos para bebés, en su habitación... Quiero seguir pensando que podría estar embarazada. 

Pero mañana lo sabré, y si es positivo todo esto solo reflejará esa incertidumbre previa, pero si es negativo se esfumarán todos esos pensamientos. Y caeré, pero me levantaré, y no sabemos qué camino tomaremos entonces, pero de lo que estamos seguros es de que nuestra búsqueda finalizará, no ahora, pero pensamos buscar a nuestro/a hijo/a por el mundo entero si es necesario, probablemente él o ella ahora esté pensando en encontrarnos a nosotros, y lo haremos.

La moneda está echada, ¿será cara o cruz?